LA PANDEMIA GOLPEA AL TRANSPORTE MARÍTIMO
Las grúas trabajan horas sacando los contenedores de los buques de carga, debido a la pandemia del transporte marítimo mundial. Por ahora los contenedores eran arrojados a los camiones.
Un buque surcoreano que normalmente también transporta pasajeros, pero que se ha dedicado por completo a la carga.
Lianyungang no está sola. La red mundial de transporte marítimo que mantiene en circulación los alimentos, la energía y los bienes de consumo, la economía mundial a flote se enfrenta a la mayor prueba de resistencia.
El comercio marítimo ha sido objeto de análisis después de que un megabuque de propiedad japonesa encallara en el Canal de Suez, bloqueando el concurrido canal durante casi una semana, en medio de la crisis el aumento de los costes de los fletes podría afectar los precios de consumo.
La expansión de la pandemia atascó los patrones predecibles por los que se reparten los contenedores marítimos en los puertos del mundo cuando muchos países empezaron las restricciones de Covid-19 a finales del verano pasado, una oleada de demanda reprimida por parte de los consumidores.
La saturación en los puertos
Los buques se han acumulado en los puertos occidentales , dejando a los exportadores asiáticos clamando por la devolución de los contenedores vacíos para nuevos envíos , las empresas están preocupadas presionando para que los contenedores de carga ferroviaria se utilicen en el servicio marítimo, realizando pedidos desviando algunos envíos a otros puertos chinos.
Se disparó el precio de un contenedor de 40 pies desde Lianyungang a Estados Unidos a más de 10.000 dólares, frente a los 2.000-3.000 dólares habituales,la demanda de los consumidores estadounidenses ha sido un factor clave. Un funcionario del puerto de Los Ángeles aseguró la semana pasada, que más de dos docenas de barcos estaban esperando para atracar en las afueras de Los Ángeles y Long Beach, los dos puertos más activos de Estados Unidos.
Muchos buques portacontenedores han sido retirados del mercado para ser reacondicionados con el fin de cumplir las normas de reducción de emisiones de carbono, mientras que el distanciamiento social y los ocasionales brotes de coronavirus.
El mayor transportista de contenedores del mundo, pasó de tener pérdidas en 2019 a un beneficio de 2.900 millones de dólares el año pasado, en gran parte gracias al aumento de los volúmenes y a la subida de los precios en el último trimestre de 2020.
Por ahora los países más pequeños que dependen de las exportaciones, desde el sudeste asiático hasta América Latina, atendidos por rutas alimentadoras de menor prioridad, tienen dificultades para llevar sus productos al mercado.
El doble golpe de la pandemia y el atasco del Canal de Suez ha provocado un debate sobre las reformas necesarias en el sector del transporte marítimo para facilitar los flujos y ayudar a responder a las crisis. El impacto a largo plazo sobre el comercio y los consumidores sigue siendo difícil de prever, ya que nadie sabe con certeza cuándo se aliviará la situación.
Por ahora, los grandes minoristas estadounidenses han absorbido en gran medida los costes de transporte añadidos, pero se espera que los consumidores sientan este aumento en algún momento.
Fuente: fullavantenews 5 de abril 2021